"Tú, pues, que enseñas a otro, ¿no te enseñas a ti mismo?" Romanos 2:21
"Toda la escritura es inspirada por Dios, y úti para enseñar para redargüir, para
corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto,
enteramente preparado para para buena obra" (2Timoteo 3:16,17).
El ser humano desde que nace empieza aprender y en un principio es bajo la imitación, y conforme va creciendo en su vida practica lo que conlleva a su enseñanza; pero a fin de cuentas el hombre siempre está aprendiendo, ya sea cosas buenas o malas. El problema aquí va hacer de quien se está aprendiendo. Esto es como la escuela, si tenemos un buen maestro que se preocupe por el desarrollo de sus alumnos, el cual tiene el amor y la dedicación para hacerlo, por supuesto que tendremos alumnos bien preparados académicamente. Lo mismo sucederá en la casa, si hay buenos padres que se preocupan por sus hijos, ellos tendrán hijos que nunca los avergonzaran.
En lo que confiere en la vida espiritual es lo mismo, depende de quien nos enseñe será como nos desarrollaremos en ésta área. El aprendizaje, cuando ya somos adultos se nos hace más dificil, porque creemos que ya lo sabe todo, y cuando hemos encontrado a personas que nunca han leído la Biblia, ellos piensan que conocen todo acerca de Dios; y por supuesto, sus opiniones están bajo fundamentos incorrectos en las escrituras, porque sólo han aprendido lo que han escuchado en la calle. Ejemplo, en lo espiritual, el ser humano dice creer en Dios, pero en su desarrollo no ha aprendido de Dios. lo sabemos en la conducta de desobediencia que muestra continuamente, he aquí el llamado de Jesús.
Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallareis descanso para vuestras almas (Mateo 11:29).
Desde la creación del hombre, ha sido un continúo rechazo de las enseñanzas de su creador: Adan no obedeció, marcando así a la humanidad entera a una eterna rebelión. Pero Dios en su bondad infinita queriendo restaurar la relación con los seres humanos entregó a su Hijo para que ésto fuera posible. Han pasado dos mil años y parececiera que el mensaje no se le ha puesto la mayor atención, porque muy poco queremos aprender de El.
La Biblia nos enseña tantos ejemplos de como la humanidad rechazó y sigue rechazando su palabra; un claro ejemplo, es el de Israel que siendo un pueblo llamado por Dios en cuarenta años se quiso volver a la esclavitud, porque segó su entendimiento al aprendizaje que Dios le daba. La fidelidad de Dios a su palabra; El nunca nos ha fallado aunque nosotros no hemos aprendido a obedecerle; a consecuencia de esto son todos los dolores de la vida.
Las bendiciones que trae la obediencia; Mira, yo he puesto delante de tí hoy la vida y el bien, la muerte y el mal (Deuteronomio 30:15).
Israel tenia que aprender bien de Dios, que es el autor de la vida y del bien, y así poder disfrutar de estas bendiciones durante su estadía en la tierra y en la eternidad. Por falta de aprender y obedecer a Dios; hoy tenemos consecuencias que muchas de ellas son irreparables, como el no poder vivir en familia, el no entender el amor de Dios, la destrucción del hombre por el hombre, destrucción de la naturaleza, destrucción de los valores espirituales, morales, sociales y ésos valores finos que Dios creó dentro de nosotros. El llamado es a todos a aprender de la Biblia para ser restauradores de esta humanidad que cada día colapsa, aún con tanta tecnología y provisiones.